En un comunicado, el grupo parlamentario afirma que el objetivo es aclarar tanto la situación actual como las perspectivas de futuro de la aerolínea, sobre todo a la luz de sus crecientes pérdidas. El proceso de privatización, iniciado en marzo de 2023, no ha registrado avances claros.

El líder de Chega/Azores, José Pacheco, destacó las recientes cifras financieras del grupo SATA, que muestran que Azores Airlines y SATA Air Açores cerraron 2024 con unas pérdidas combinadas de 82,8 millones de euros, casi el doble que en 2023. Sólo Azores Airlines registró un déficit de 71,2 millones de euros, frente a los 26 millones del año anterior.

Pacheco advirtió de que la situación financiera de SATA se está convirtiendo en "un pozo sin fondo" e instó a tomar medidas inmediatas. Reiteró la postura de Chega de que Azores Airlines debería cerrarse en lugar de privatizarse, debido a la continua carga financiera que supone para los contribuyentes.

SATA atribuyó parte de las pérdidas a factores excepcionales, como las malas condiciones meteorológicas, las tensiones en las infraestructuras y el aumento de los costes de personal debido a los nuevos convenios laborales. La empresa también citó provisiones legales relacionadas con un litigio con Hifly sobre un avión A330, conocido como el "Cachalote", con unos costes asociados superiores a 30 millones de euros.

El consejo de administración de SATA declaró que actualmente está aplicando un Plan de Sostenibilidad Financiera, que incluye 41 medidas destinadas a mejorar la eficiencia y generar 65 millones de euros de ahorro. Rui Coutinho, Consejero Delegado de SATA, confía en que 2024 marque un punto de inflexión y que 2025 sea testigo de una recuperación financiera, con unos primeros resultados de este año que muestran un progreso alentador.