Por fin ha llegado el verano y, con la subida de las temperaturas, es posible que esté pensando en ir al lugar preferido del país para disfrutar del calor: la playa.

Aunque un día junto al mar puede hacer maravillas para el cuerpo y la mente, también presenta algunos retos de seguridad específicos para las personas mayores. Desde la gestión de la exposición al calor hasta la navegación por terrenos irregulares, un poco de preparación puede ayudar mucho.

Tanto si está planeando un paseo junto al mar como un día entero en la orilla, aquí tiene algunos consejos de Caroline Abrahams, directora benéfica de Age UK, que le ayudarán a aprovechar al máximo sus salidas a la playa este verano...

¿Cuáles son los riesgos más comunes a los que se enfrentan las personas mayores en la playa?

Muchos de nosotros vamos a la playa con el deseo de volver a casa con un bronceado dorado, pero es fundamental tener cuidado, ya que pasar demasiado tiempo al sol puede provocar insolación y deshidratación.

"El agotamiento por calor y la insolación debidos a la exposición prolongada al sol son riesgos comunes para los adultos mayores, y la deshidratación también puede convertirse en un riesgo mayor debido al envejecimiento natural y a posibles medicamentos como los diuréticos", explica Abrahams. "El sobreesfuerzo o la deshidratación también pueden causar confusión o desmayos.

"Además, una piel más fina hace a los mayores más susceptibles a las quemaduras solares".

Además, los adultos mayores son más propensos a caídas y lesiones en la playa.

"La arena irregular, las rocas y las olas pueden aumentar el riesgo de caídas", señala Abrahams. "Además, algunos medicamentos y problemas de salud pueden hacerte más susceptible al calor, así que consulta con tu farmacéutico/GP o información sobre la medicación y cúbrete en consecuencia".

Créditos: PA;

¿Cómo pueden prepararse los mayores para un día de playa?

Tanto si prefiere una playa de arena como de guijarros, recuerde llevar todo lo esencial.

"Lleve protección solar (FPS 30 o superior), sombreros de ala ancha, gafas de sol, agua, tentempiés, medicamentos y un teléfono móvil cargado", recomienda Abrahams. "La ropa transpirable y de colores claros le ayudará a mantenerse fresco y protegido de los rayos UV".

Elegir asientos cómodos puede mejorar mucho tu experiencia junto al mar, y tu espalda lo agradecerá más adelante.

"Traiga sillas o busque otros asientos en la playa que le resulten más cómodos, y llévese una sombrilla o una tienda de playa para disfrutar de la sombra", recomienda Abrahams.

¿Cuáles son las mejores horas del día para que los mayores visiten la playa?

"Intente ir a primera hora de la mañana (antes de las 11) o a última hora de la tarde (después de las 15), cuando el sol es menos intenso", aconseja Abrahams. "Evite las horas de más sol (de 11 a 15 horas) para reducir la exposición a los rayos UV y el riesgo de sobrecalentamiento".

¿Qué factores debe tener en cuenta a la hora de elegir una playa a la que ir?

Si planea un día de playa con la familia, intente elegir un lugar accesible y con buenas instalaciones.

"Busque rampas, caminos y aparcamientos cercanos, y asegúrese de que hay aseos, duchas y zonas de sombra", sugiere Abrahams.

Compruebe también el terreno y averigüe lo tranquilas que son las aguas.

"Busque una playa de arena suave, sin rocas ni conchas afiladas", recomienda Abrahams. "Las playas con socorristas y oleaje suave también suelen ser más seguras".

Créditos: AP;

¿Qué precauciones deben tomar los mayores para evitar los golpes de calor o las quemaduras solares?

"Utilice sombrillas o siéntese en asientos a la sombra y vuelva a aplicarse crema solar cada dos horas o después de nadar", aconseja Abrahams. "Lleva ropa que proteja de los rayos UV, como mangas largas y un sombrero de ala ancha".

Y recuerda, ¡la hidratación es clave!

"Los signos de deshidratación incluyen boca seca, orina oscura, dolor de cabeza o confusión", enumera Abrahams. "Por tanto, beba agua con frecuencia, aunque no tenga sed, pero beba agua en pequeñas cantidades con frecuencia en lugar de grandes cantidades de una vez".

El director de la organización benéfica también hace hincapié en la importancia de conocer los síntomas de la insolación y el golpe de calor, para poder estar atento a ellos en el futuro.

"Los síntomas relacionados con el calor incluyen mareos, náuseas, confusión o sudoración excesiva", destaca Abrahams.

¿Qué tipo de calzado o equipo de asistencia es mejor para las personas mayores que caminan sobre la arena o en el agua?

Abrahams sugiere invertir en un buen par de sandalias de apoyo, que tengan suelas antideslizantes y correas ajustables. "Los bastones o bastones también pueden ayudar en terrenos irregulares", añade el director de la organización benéfica.

También recomienda llevar calzado para el agua si le apetece chapotear en el mar.

"El calzado acuático le protegerá de los objetos punzantes y le proporcionará estabilidad", dice Abrahams.

¿Cómo pueden los mayores disfrutar del mar con seguridad?

"Báñese siempre en playas vigiladas y evite las corrientes fuertes, y no nade nunca solo, o avise a alguien de que va a hacerlo", aconseja Abrahams. "Además, utilice dispositivos de flotación o agárrese a las barandillas si las hay".

Además, recuerde que aclimatarse a la temperatura del agua es crucial para nadar de forma segura y agradable.

"Aclimátese gradualmente a la temperatura del agua para evitar el shock", dice Abrahams.