Las ballenas jorobadas tienen una baja densidad de células ganglionares retinianas, con una densidad de capacidad máxima de 180 células por milímetro cuadrado, muy por debajo de las 12.000 a 38.000 células por milímetro cuadrado humanas.
La agudeza visual de la vista de una ballena jorobada es de 3,95 ciclos por grado, significativamente inferior a la humana de 60 a 100 CPD, e incluso inferior al umbral de la ceguera humana de 6 CPD.