En un paso histórico para la transición energética de Portugal, Capwatt es una empresa energética portuguesa pionera que ha conseguido 12,5 millones de euros de financiación verde para desarrollar la primera planta de producción de biometano del país en Aljustrel. Este innovador proyecto ejemplifica el potencial de las soluciones energéticas sostenibles para impulsar simultáneamente el crecimiento económico, la protección del medio ambiente y la revitalización rural.

El proyecto de Aljustrel se centra en la conversión de subproductos agroindustriales en biometano de alta calidad, una alternativa renovable al gas natural. En concreto, la instalación valorizará los residuos de AZPO - Azeites de Portugal, transformando lo que de otro modo serían pasivos ambientales en un recurso energético limpio. Una vez en funcionamiento, se espera que la planta produzca 57 GWh/año de gas renovable y reduzca las emisiones de carbono en aproximadamente 23.000 toneladas equivalentes de CO₂ anuales.

Capwatt, fundada en 2008 gracias a la experiencia del GrupoSonae en el sector energético, es ahora un actor clave dentro de Sonae Capital Industrials. Con operaciones en Portugal, España, Italia y México, Capwatt se centra en la producción descentralizada de energía y servicios, incluyendo biomasa, solar, eólica, cogeneración, biogás, metanol renovable y ahora biometano.

La planta de Aljustrel es un ejemplo de los principios de la economía circular. Los residuos agrícolas, ganaderos e industriales, a menudo costosos de eliminar, se reconvierten en gas renovable y digestato orgánico, un subproducto utilizable como fertilizante natural. Esto no sólo reduce las emisiones y los residuos, sino que también genera nuevas fuentes de ingresos para los agricultores y los operadores agroindustriales.

Si se replican en otras regiones, proyectos como éste podrían reforzar considerablemente las economías locales y contribuir a objetivos de sostenibilidad más amplios. Al inyectar biometano en la red de gas existente, puede utilizarse en hogares, industrias o incluso como combustible para vehículos, sustituyendo de hecho los combustibles fósiles por una alternativa renovable de origen local. Esto contribuye a la independencia energética y mejora la seguridad del suministro, especialmente relevante en el actual clima geopolítico.

El planteamiento de Capwatt también tiene importantes implicaciones socioeconómicas. El proyecto fomenta la colaboración entre las partes interesadas del sector agrícola, las industrias y las empresas energéticas, al tiempo que crea puestos de trabajo y promueve el desarrollo regional en zonas como Aljustrel. No se puede subestimar su potencial para reforzar la economía local y reducir la despoblación rural.

Certificada en calidad, medio ambiente y seguridad, así como en ISCC (Certificación Internacional de Sostenibilidad y Carbono), Capwatt es un ejemplo de cómo las empresas con visión de futuro pueden combinar la innovación tecnológica con la protección del medio ambiente.

En esencia, el proyecto biometano de Aljustrel es más que una solución energética: es un modelo para una economía más ecológica e integradora. Si se extiende a todo Portugal y más allá, podría reconfigurar el futuro de la bioenergía y situar al país a la cabeza de la gestión sostenible de los recursos.